No, no es el agua, no. No es el aire, no. Tampoco los otros elementos. El disolvente universal es el tiempo.
Cuaderno de bitácora de lo casi inadvertido. (Apuntes para una literatura urgente.)
No, no es el agua, no. No es el aire, no. Tampoco los otros elementos. El disolvente universal es el tiempo.
© Enrique Alfaro Llarena